Engaños y medias verdades es a lo que estamos sometidos todos los días sin importar con que personas tratamos, no importa si es un profesional o el hijo del vecino, siempre estamos expuestos a las mentiras de otros.
Si bien es verdad todos mienten, la forma y el momento en que lo hacen es lo que mas nos afecta como miembros de una sociedad y por ende a toda nuestra comunidad.
Dice el refrán, ojos que no ven corazón que no siente, sin embargo todo se sabe al final del día y mientras mas tarde en descubrirse el engaño mas complejo sera lo que haya que reparar. Por ejemplo veamos el caso de un tipo que se casa con 4 diferentes mujeres usando 4 diferentes actas de nacimiento y cuando esas 4 esposas que no son conscientes de su existencia entre si, desean cobrar los seguros y otras prestaciones de este tipo, tienen que hacer todas las aclaraciones pertinentes que la ley señala.
Ahora pues, imaginemos a un tipo que se acredita con una cédula profesional falsa, mientras sea bueno en lo que hace no existirá un verdadero problema, pero si resulta ser un completo inepto entonces sus clientes serán los que paguen el precio.
Dicho lo anterior la reflexión del día de hoy es acerca de la típica "mordida", pues muchas veces una mentira puede hacerse pasar por una verdad cuando hay dinero de por medio, así pues cuando estamos frente a una persona que se ostenta como honesta y justa podríamos preguntarle como reaccionaria frente a un oficial de transito que lo quiere multar por haberse pasado un alto; dependiendo de la respuesta sabremos si esta persona es realmente lo que dice o solo un charlatán.
Una vez comprobado que el individuo con el cual tratamos es un mentiroso mas, debemos ver hasta que punto es peligroso. Dado que la mentira solo tiene como objetivo el beneficio personal, esto significaría que para que no salir comprometido de manera negativa engañara a cuantos pueda y a los que no consiga engañar los intentara comprar transformándose en sus víctimas inmediatas las personas que no son de su circulo social y en potenciales las que si pertenecen al ser susceptibles de ser traicionadas por parte de esta "clase de humanos".
Por lo pronto contestemos esta pregunta, ¿quíen puede tirar la primera piedra?.
Si bien es verdad todos mienten, la forma y el momento en que lo hacen es lo que mas nos afecta como miembros de una sociedad y por ende a toda nuestra comunidad.
Dice el refrán, ojos que no ven corazón que no siente, sin embargo todo se sabe al final del día y mientras mas tarde en descubrirse el engaño mas complejo sera lo que haya que reparar. Por ejemplo veamos el caso de un tipo que se casa con 4 diferentes mujeres usando 4 diferentes actas de nacimiento y cuando esas 4 esposas que no son conscientes de su existencia entre si, desean cobrar los seguros y otras prestaciones de este tipo, tienen que hacer todas las aclaraciones pertinentes que la ley señala.
Ahora pues, imaginemos a un tipo que se acredita con una cédula profesional falsa, mientras sea bueno en lo que hace no existirá un verdadero problema, pero si resulta ser un completo inepto entonces sus clientes serán los que paguen el precio.
Dicho lo anterior la reflexión del día de hoy es acerca de la típica "mordida", pues muchas veces una mentira puede hacerse pasar por una verdad cuando hay dinero de por medio, así pues cuando estamos frente a una persona que se ostenta como honesta y justa podríamos preguntarle como reaccionaria frente a un oficial de transito que lo quiere multar por haberse pasado un alto; dependiendo de la respuesta sabremos si esta persona es realmente lo que dice o solo un charlatán.
Una vez comprobado que el individuo con el cual tratamos es un mentiroso mas, debemos ver hasta que punto es peligroso. Dado que la mentira solo tiene como objetivo el beneficio personal, esto significaría que para que no salir comprometido de manera negativa engañara a cuantos pueda y a los que no consiga engañar los intentara comprar transformándose en sus víctimas inmediatas las personas que no son de su circulo social y en potenciales las que si pertenecen al ser susceptibles de ser traicionadas por parte de esta "clase de humanos".
Por lo pronto contestemos esta pregunta, ¿quíen puede tirar la primera piedra?.
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